lunes, octubre 02, 2006

Diagnóstico Psicológico Entregado

Ayer, Domingo, un día ordinario que se vuelve extraordinario. Por fin, después de mucha insistencia le entregué a Luis Edgar (antes innombrable) su perfil psicológico, el cual me hizo el grandísimo favor al cooperar para mi calificación.
No revelaré los detalles de su personalidad, sus actitudes y aptitudes, no por no quemarlo sino porque amablemente lo suplicó y ¿¡cómo he de resistirme!?.
Mientras bebíamos un café, después de unos deliciosos churros rellenos de cajeta mmmmmm!!!! y unas Kiko donas; hablabamos de lo que significaba cada palabra, claro de algunas no me acuerdo porque no soy experta en adultos, mi acentuación son los niños. Parece que le atiné a la mayoría de sus características y obtuvimos nuevas que ni él ni yo conocíamos.
Obviamente me quedé con pruebas, interpretaciones y diagnóstico por cuestiones éticas o algo así; pero le entregaré algo mas formal sobre esto.
El sábado escribió unas letras muy significativas para mi en el vidrio de mi carro, aprovechando el vapor o lo sucio de éste, la verdad no sé, lo que si sé es que me embobo viéndolas cada semáforo en rojo jaja siiiii soy cursi y que???.
Hoy, mis compañeros de salón, mis amigas y yo decidimos no entrar a la clase de la maestra "mejor que se muera" para ir a apreciar el entrenamiento de los Tigres (loosers) de Monterrey que huirían de su tierra, según los chismes, pa venir a entrenar a nuestra ciudad. Todo pareció ser, eso, un chisme porque solo logramos contemplar a gente con aspectos medio raros haciendo ejercicio pero nadie de los Tigres más que unos cuantos fieles seguidores con la camiseta bien puesta; mientras comíamos semillas apreciábamos a unas cuantas personas con sobrepeso y escesivos dotes físicos tratando de hacer algo por su salud mientras nosotros nos volábamos las clases.
Como dice la canción "Nos cansamos de esperar" y llegamos a la escuela a escuchar música romanticona y hablar sobre la vida sentimental de todos. Encontramos que el Chino puede tener la capacidad de querer a alguien, que es un celoso compulsivo pero un mandilón de primera; que Ale se delata a la menor provocación, que Vicky quiere mucho a su novio, que Gil no tiene quien le haga cariñitos de vez en cuando y, en resumen que todos estamos bien enamorados y, como no si fomamos parte, las mujeres, del club de "Las Mujeres que Aman Demasiado".

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