¿Quién los entiende Preciosos?

Sábado por la noche, necesitábamos una reunión muy muy sencilla y relajada después de la intensa noche del viernes, a lo cual decidimos comprar ingredientes para que Toño elaborara unas deliciosas piñas coladas. Fuimos al supermercado dispuestos a completar con $150 pesos, pero oh sorpresa nos pasamos por $6 miserables pesos y pasamos por la desagradable vergüenza de sacar mercancia (bueno en realidad Toño pasó por esa desagradable situación porque la Mana y Yo corrimos jaja). Toño preparaba las piñitas mientras la Mana y Yo nos pasabamos los ultimos chismes esperando a Servando; llegó y como hacía un aironaso de los mil demonios entramos a la casa y nos dispusimos a ver el concierto de RBD que nos provocó a todos, menos a Toño, tremendisimo sueño. Servando (el intenso) propuso ir al Quijote a la 1 am, disque a ligar (¿mounstros?). Como dije antes, queríamos algo tranquilo por lo cual la Mana y Yo no andabamos en nuestras mejores garritas; pero nos valió argumentando: "Hay ni que nos fueramos a encontrar a alguien interesante, bah vamonos". Llegamos al lugar y Toño con su vida social tan activa se encontró a unas tipas no de muy buena reputación, Servando desapareció y la Mana y Yo entramos solitas al antro. De inmediato vi a un hombre de muy buen ver, diría yo que guapísimo. Nada mas lo observé dado que mi aspecto no era el mas adecuado para intentar algo más. El amigo del tipo se acercó a la Mana para invitarla a bailar con su amigo y a mi con él, a lo cual mi postura fué de aceptación aunque a mí no me tocaba la mejor parte porsupuesto. El insistía e insistía y la Manita se rehúsaba y se rehúsaba hasta que el hombre en discusión se acercó para seguir insistiendo aunque no logró nada. (Hay mana qué barbara!!!). Me propuse mostrarle a la Mana lo que dejó ir. Argumentando que no lo había visto bien, la llevé a un punto estratégico donde se podía apreciar la belleza del hombre y casi casi se golpeó contra la pared, yo también quería golpearla pero como toda buena amiga, chin!!! no lo podía permitir. Rondábamos por el antro de mala muerte y, en mas de una ocasión, me topé con otro hombre guapísimo y pensé: "¿Destino o casualidad?, bah lo que sea hay que aprovecharlo". Fuimos tras él hasta que llegó a la puerta y salió del lugar; nosotros, bueno Yo, admirandolo desde las escaleras hasta que me cachó (no estábamos muy lejos), me saludó y me dijo "vámonos, a dónde van" a lo que pude contestar "no, no se"; propuso que fuera a donde estaba él, yo propuse que viniera él; insistió en que fuera, yo y traté de hacer un trato de avanzar micha y micha del camino; y entró junto con sus amigos de nuevo al lugar. Pasé terribles momentos de angustia porque mis fachas eran horribles, me había puesto el pantalón mas guango que encontré, en fin llegó cerca de nosotros y oh maldita mala suerte se encuentran a unas tipas y se distrajo y lo perdí, chin!! ni modo será pa´ la proxima, lo bueno es que lo conozco de la prepa y quizá lo volveré a ver con una mejor presentación. Cómo es posible que cuando una se esmera y pasa horas y horas arreglandose, peinandose, pintandose, vistiendose y perfumandose para salir a presumir a los demás lo bellas que quedamos casi nadie lo note, menos hombres tan guapos como los de ayer; y cuando una ni pretende ligar ni hacerse notar los hombres guapos simplemente aparecen y están ahí dispuestos a dar una oportunidad y, claro, una por insegura y baja de autoestima la pierde o será por pende......?. "Ayyyyyyyyy esos hombres qué haríamos sin ellos, son preciosos". PD: Necesito una sesión de besos (ya tengo en mente quien me la puede dar)