Anteriormente he dicho que no son los mejores momentos de mi familia, el 16 de mayo cumplió años mi mamá y mi tía llamó para pedir mi opinión acerca de acerle una mini fiesta sorpresa en casa de mi abue; lo dudé un poco conociendo el caracter de mi mamá pero pensé que sería bueno que por un momento se olvidara de la tristeza que la aqueja además que sería un lindo detalle de nuestra parte ya que ella siempre se esmera por festejar los cumpleaños de todos y los de ella a veces no son tan pomposos.
Ya por la noche al salir de clases llamé a mi novio para que pasara por mi e irnos a la cena; llegamos y, de hecho yo siempre me la paso bien con esa gente porque nos tenemos harta confianza y nos hechamos carro sano.
De pronto mi papá y mi tio sacaron guitarras y comenzaron las mañanitas seguidas de otras cancioncillas dedicadas a la cumpleañera, a pesar de su esmero terminaban las canciones a medias ya fuera porque no se las sabían o porque se equivocaban y cantaban gacho y además no aguantaban la carrilla.
A mi novio se le ocurrió decirme al oído que le pasaran la guitarra, mala elección porque de hecho lo grité inmediatamente y mi papá rapido y presuroso le entregó la guitarra a pesar de sus constantes negativas, después de un rato en que la familia se unió para rogarle cantó nuestra canción, también en la versión corta, después solo sugirió canciones de Arjona que a mi mamá no le gustan.
Luego de un rato mamá se acordó de una canción que excepcionalmente le gusta que creo se titula "Del otro lado del sol", pa pronto mi novio se acomoda nuevamente la guitarra y comenzó a cantar, al final una lluvia de aplausos de mis tíos, mi abuelita y, por supuesto de mi mami. Pude notar que mi mamá estuvo contenta pero no tranquila, le hacía falta algo.
